El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires habilitó el 911 para denunciar casos donde entidades sindicales o de cualquier otro tipo controlen precios en comercios o depósitos.

“CABA habilita el 911 para denunciar controles ilegales de precios realizados por patotas sindicales o piqueteros”, manifestó el jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel.

De modo similar se había expresado el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta: “El gobierno nacional manda al sindicato de Camioneros y a militantes de Barrios de Pie a patotear centros de distribución para “controlar precios”. Una decisión ilegal, que no sirve para nada y que es lo opuesto a lo que necesitamos los argentinos”.

“Es ilegal porque el Estado no puede usar a los sindicatos ni a los piqueteros para controlar. No tienen nada que hacer ahí, si el Estado quiere controlar algo tiene que ocuparse por sí mismo, no puede delegar esa tarea. Pero, además, no sirve para nada. No sé cuántas veces van a intentar apretar para controlar precios antes de convencerse de que no funciona. La inflación se resuelve con medidas planificadas que ataquen el problema”, sumó.

“Quienes trabajan y producen necesitan que les saquen la pata de encima y los dejen trabajar, no que les manden patotas a apretarlos poniendo a argentinos contra argentinos. Que el gobierno se dedique a gobernar y deje a los argentinos trabajar”, concluyó.

En tanto, el ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, explicó que el sindicato de Camioneros “no controla, sino que abastece el proceso de información”.

“En los acuerdos de precios participan el Estado, empresarios y trabajadores, en todos. Si usted mira lo que fue el programa de Precios Justos en supermercados, estaban De Narváez, Coto y Carlos Pérez y Cavalieri. En los sectores vinculados a la logística, están los repositores, por un lado, y por otro lado están los que hacen la logística, que son los camioneros, que en realidad lo que hacen es abastecer el proceso de información, porque lo bueno es que todos nos pongamos como objetivo derrotar la inflación. Acá tienen que participar todos: Gobierno, oposición, empresarios, trabajadores en un objetivo patriótico, que es construir una economía sin inflación, que es un problema que la Argentina en los últimos 40 años reiteró un sinnúmero de veces y la inflación destruye el ahorro, pero además destruye el poder de compra de la gente. Entonces es clave que nos lo pongamos como objetivo”, manifestó ante Infobae.

“Acá hay una cuestión a buscar siempre escandalizar y generar confrontación, que es un problema que tiene la Argentina. De la mesa de acuerdo en los programas de precios participaron el Sindicato de la Alimentación, porque de alguna manera en el precio de los productos también hay un peso vinculado a la participación del salario. El sindicato de Comercio, el Sindicato de Camioneros, el Sindicato Textil y el Sindicato del Calzado en los acuerdos vinculados a la rebaja de precio en la indumentaria y la rebaja de precio en el calzado deportivo. Cada uno de los sectores. La UOM y SMATA participaron en el programa de acuerdo con el sector automotor y con el sector de la telefonía celular. Es bueno que los acuerdos sean entre empresarios, trabajadores y Estados, con dos objetivos: derrotar la inflación, para que el consumidor pueda mejorar su capacidad de consumo, y además cumplir cada uno su parte. La paz social se logra con la estabilidad macroeconómica y con participación de todos los sectores”, manifestó el funcionario.