En el marco del Día de la Tierra, la vicejefa de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Clara Muzzio, plantó junto a embajadores y funcionarios de la Unión Europea unos 60 árboles nativos en la Reserva Ecológica Costanera Sur del barrio de Puerto Madero (Comuna 1) con el propósito de “promover la conciencia ambiental y la conservación de nuestros recursos naturales”.

“Como Team Europe realizamos esta actividad en el marco del Día de la Tierra que se celebró el pasado 22 de abril. La Unión Europea ha demostrado un compromiso firme y constante con la protección del medio ambiente”, indicó Amador Sánchez Rico, Embajador de la Unión Europea y agregó: “A través de iniciativas como el Pacto Verde Europeo, hemos trazado una hoja de ruta para transformar nuestras economías hacia modelos más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente”.

Junto a Muzzio estuvieron presentes Ana Ciuti, subsecretaria de Relaciones Internacionales; Natalia Persini, Subsecretaria de Ambiente e Ignacio Suárez de la Rosa, Director General de Áreas de Conservación y Restauración Ambiental.

En la plantación estuvieron presentes: Amador Sánchez Rico, Embajador de la Unión Europea, Karl Dhaene, Embajador de Bélgica, Stoyan Mihaylov, Embajador de Bulgaria, Nicola Lindertz, Embajadora de Finlandia, Romain Nadal, Embajador de Francia, Aleksandra Piątkowska, Embajadora de Polonia, Torsten Sven Ericsson, Embajador del Reino de Suecia, Péter Kveck, Embajador de Hungría, Igor Šef, Encargado de Negocios de Eslovenia, Eran Nagan, Primer Consejero de la Unión Europea, Alberto Scarano, Primer Secretario en la Oficina Política y de Cooperación para el Desarrollo de Italia, Sarah Maguire, Tercera Secretaria del Departamento de Relaciones Exteriores de Irlanda y Gisela Gonzalez, asesora de prensa y diplomacia pública de la Unión Europea.

En el GCBA informaron: “La plantación es parte de un proyecto integral de restauración ecológica que tiene como objetivo la recuperación de ecosistemas degradados y la preservación del entorno natural de la Ciudad. Es por esto que se deben considerar todas las medidas biológicas tendientes a mantener y aumentar la diversidad genética del lugar, a partir de especies autóctonas de la región, y controlando y erradicando las especies foráneas que invaden la reserva”.