El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires informó que avanza la obra del nuevo Borde Costero del Barrio Rodrigo Bueno, en la Costanera Sur de Puerto Madero (Comuna 1). Es una “obra clave para continuar con el proceso de integración del barrio, porque significará un mayor acceso a los servicios de agua y cloacas para los vecinos”, indicaron autoridades porteñas.

Días atrás lo visitaron el jefe de Gabinete de la Ciudad de Buenos Aires, Felipe Miguel; la ministra de Desarrollo Humano y Hábitat, Maria Migliore; y el Presidente del Instituto de la Vivienda porteño, Christian Werle.

El Borde Costero, que va desde la Avenida España a lo largo del canal y culmina en un mirador ubicado en la desembocadura del mismo en el Río de la Plata, será un nuevo atractivo turístico para todos los vecinos de la Ciudad, donde además de disfrutar de la naturaleza se podrán encontrar nuevos emprendimientos gastronómicos que tendrán propuestas de platos típicos de comida latinoamericana. Esto permitirá no solo ofrecer una alternativa diferente para los turistas sino además lograr un impacto positivo en el desarrollo económico de las familias que viven en el barrio.

“Para nosotros integrar es que existan las mismas oportunidades en todos los barrios, y en ese sentido trabajamos: apuntamos a que todos los ciudadanos vivan en una vivienda digna en una calle con numeración, que accedan a una educación de calidad, que tengan garantizado el cuidado de su salud, que puedan contar con una red de transporte público que llegue a todos lados, que vivan en una Ciudad segura, que accedan a oportunidades de trabajo. No se trata solamente de integrar un barrio, sino de trabajar en todos los barrios por igual”, aseguró Felipe Miguel.

“Con esta obra vamos a lograr una mejor conectividad del barrio con el resto de la ciudad, y eso va a potenciar los emprendimientos gastronómicos, generando ingresos y nuevas fuentes de trabajo” expresó Migliore, y agregó: “Desde el gobierno de la Ciudad seguimos invirtiendo en obras que mejoran la calidad de vida de las personas”.

Para poder avanzar con esta obra fue necesaria la relocalización de las familias que se encontraban a la vera del riachuelo a las nuevas viviendas construidas por el Instituto de Vivienda de la Ciudad, para luego avanzar con la demolición de las viviendas que se encontraban en el barrio histórico.