Un estudio del GCBA alerta por la “pérdida del poder adquisitivo”: en el inicio de 2024, el ingreso familiar quedó casi 70 puntos debajo del Índice de Precios al Consumidor de CABA
"Se observa un deterioro en la distribución del ingreso, tanto a nivel individual como de los hogares", alerta la Dirección General de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires.
En base a la última Encuesta Trimestral de Ocupación e Ingresos (ETOI), la Dirección General de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires informó que en el primer trimestre de 2024 “el ingreso total familiar promedio se ubica en $843.445, lo que representa una suba del 196,8% con respecto al mismo período del año anterior, 67 puntos porcentuales por debajo del incremento correspondiente al IPCBA (Índice de Precios al Consumidor de la CABA, de 263,8%”. “Se observa un deterioro en la distribución del ingreso, tanto a nivel individual como de los hogares”, alertan fuentes oficiales.
“En un contexto de reducción de las tasas de actividad y de empleo, los ingresos individuales crecen nominalmente en el primer trimestre de 2024 respecto al mismo período del año anterior (198,3%). La evolución de los precios en el período (263,8%) resulta superior a la dinámica de los ingresos laborales (206,4%) y especialmente a la de los ingresos no laborales (183,2%), lo que se traduce en una pérdida del poder adquisitivo, con repercusiones en las condiciones de vida de los hogares de la Ciudad. Dentro de los ingresos laborales, la población asalariada presenta un aumento de 212,4%, quedando muy por detrás la suba de los cuentapropistas (155,3%). En los ingresos no laborales, se destaca el atraso de las jubilaciones y pensiones (154,8%) en relación a la inflación”, resume el informe.
“Sobre valores significativamente más bajos, los hogares residentes en el Sur de la Ciudad tienen un alza interanual del 196,9% ($696.784), por debajo de los del Norte, cuyo incremento fue del 219,7% ($1.016.440). En el Centro, el ingreso total familiar sube 187,0% ($822.981)”, expuso el documento.
“El ingreso total familiar promedio en la Ciudad es 3,3% superior al valor de la canasta total para un hogar compuesto por una pareja de varón y mujer de 35 años, económicamente activos y propietarios de la vivienda con dos niños varones de 6 y 9 años”, menciona el estudio oficial. En relación al mismo período de 2023, la capacidad de compra del ingreso total familiar respecto a la canasta disminuyó.
También se informó que El ingreso per cápita familiar de los hogares promedia los $ 436.149, un 186,9% por encima del registrado en el mismo trimestre de 2023. En los hogares del Norte de la Ciudad este ingreso se ubica en $600.077, en tanto que en el Centro es de $417.814 y en el Sur de $294.446 (representando subas del 200,9%, 175,6% y 213,9%, respectivamente)
Los hogares del Norte, además de contar con mejores ingresos individuales, tienen menos integrantes en promedio, por lo que presentan un ingreso per cápita familiar más alto, que equivale a más de dos veces el del Sur.
El 30% de los hogares de menores ingresos per cápita concentran el 36,8% de las personas pero sólo el 12,2% de la suma de ingresos. Al mismo tiempo, los que se ubican en el 30% superior involucran al 22,8% de los residentes y más de la mitad de la masa de ingresos (53,2%).
Los ingresos individuales, provenientes de fuentes laborales y no laborales, alcanzan los $526.482, con un incremento interanual del 198,3%, cercano al de los ingresos totales familiares. En la zona Norte, el aumento fue de 211,7%, en el Centro de 190,1% y en el Sur de 205,7%.
En promedio, los ingresos de la población en la zona Norte son 84,8% superiores a los de la zona Sur. Los ingresos laborales se expanden por encima de los ingresos no laborales (206,4% y 183,2% respectivamente).
Los ingresos de la ocupación principal ascienden a $510.758 en el período, lo que marca un crecimiento interanual del 209,4%.
La mitad de los trabajadores varones ganan menos de $400.000 y la mitad de las mujeres, menos de $380.000.
El 10% de los ocupados con menores ingresos percibe menos de $130.000 en su ocupación principal. En contraste, el 10% de quienes tienen mejores ingresos, supera $1.000.000. En promedio, el último decil gana más de 21 veces lo que gana el primero.
Con un promedio de 38 horas semanales trabajadas para toda la población ocupada, los varones registran 41 horas y las mujeres 35 horas.
Los ingresos de la población asalariada alcanzan en promedio $523.070, marcando un crecimiento interanual de 212,4%. En tanto, los trabajadores por cuenta propia perciben $365.927, con una dinámica interanual (155,3%) que queda muy por debajo de la correspondiente a los precios (263,8%).
Dentro de los ingresos no laborales, las jubilaciones y pensiones son las que mayor pérdida de poder adquisitivo tienen en el último año, con una variación de 154,8%.
En lo que respecta a la distribución de los ingresos hay un deterioro en las mediciones tanto sobre las personas como sobre los hogares.
El coeficiente de Gini del ingreso total familiar se ubica en 0,431 (por arriba del mismo período del año anterior, cuando era de 0,388). Para la población, el ingreso per cápita familiar se incrementa a 0,443 (desde 0,421 un año antes), marcando en este caso también una mayor desigualdad. Algo similar ocurre para la población ocupada, para la que el Gini de ingresos de la ocupación principal es de 0,421, por arriba del correspondiente al mismo periodo de 2023, cuando se ubicó en 0,389.