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Foto: Télam

Un juez había rechazado una denuncia de vecinos minutos antes del derrumbe de Caballito

"La excavación había tocado los caños del edificio, había acumulación de agua y eso dañaba los cimientos de una edificación tan vieja como el PH”, señaló uno de los denunciantes.

Publicado el 9 de febrero de 2024|
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Un juez había rechazado una denuncia de vecinos este jueves al mediodía, minutos antes de que se derrumbara la obra en construcción de Pedro Goyena 551, por la cual se vino abajo el primer y segundo piso del PH lindero, por el cual hubo dos muertos y más de 14 heridos. Los reclamos vecinales datan desde septiembre.

La obra tenía el permiso del Gobierno porteño, con inicio en agosto de 2023 y en la etapa de excavación. La Agencia Gubernamental de Control (AGC) la inspeccionó por última vez el 5 de diciembre. No obstante, los reclamos de los vecinos eran continuos.

“Presenté una mediación, primero, porque la excavación había tocado los caños del edificio, había acumulación de agua y eso dañaba los cimientos de una edificación tan vieja como el PH”, dijo Isaac Alejandro Romano, abogado y dueño de la inmobiliaria de la planta baja del PH que presentó la denuncia rechazada y sostuvo: “El viernes habíamos hecho la denuncia al 103, a las 13.35. Tenía el número 1177101 y tampoco fueron. O sea, es la desidia. Es el negocio por ante la vida”.

Sobre el rechazo de la medida cautelar, explicó: “Dijeron que no estaba acreditado todavía, que para parar una obra hay que tener recaudos… Bueno, hay un muerto”.

El Juzgado Civil N°3 del juez subrogante Sebastián Font rechazó este jueves la medida de no innovar, en la cual se planteaba: “La solicitud se funda en los riesgos temibles de derrumbamiento de mi propiedad sita en avenida Pedro Goyena 557, con motivo de la obra de diez pisos y dos subsuelos, obra nueva en avenida Pedro Goyena 551 de esta Ciudad; colindantes a una casa de planta baja construida en el año 1956″.

Las dos víctimas fatales habrían estado parados sobre un pasillo que se derrumbó. Cayeron al pozo de la obra lindera, quedando bajo los escombros.

 

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