Villa Lugano: inauguraron un cajero automático en Piedrabuena
Fue financiado a través de la primera obligación negociable con etiquetado social de una empresa B.
El ministro de Desarrollo Humano y Hábitat de la Ciudad de Buenos Aires inauguró este miércoles junto a la empresa Trasa un cajero automático -Unidad Modular de Inclusión Financiera (UMIF)- en la avenida Piedra Buena 3741 del Barrio Piedrabuena de Villa Lugano (Comuna 8), financiado a través de la primera obligación negociable con etiquetado social de una empresa B. Además de Gabriel Mraida, estuvieron presentes la Subsecretaria del Desarrollo del Potencial Humano, Fernanda Reyes, y el Director General de Articulación Público Privada, Gonzalo Straface. Estiman que será utilizado por unas 9.000 familias de zonas sur.
Se trata de un centro de gestión que cuenta con un cajero automático Pago24, carga de SUBE y celular y corresponsalía Santander, que brinda asistencia a los barrios populares Villa 15, Scapino, Pirelli, Santander, NHT del Trabajo y Piedrabuena, permitiendo tener un acceso directo al dinero en efectivo y trámites de diferente tipo a más de 8602 familias.
Durante la inauguración, el ministro de Desarrollo Humano y Hábitat de la Ciudad de Buenos Aires, Gabriel Mraida, resaltó la importancia que tiene para la actual gestión el desarrollo del Sur de la ciudad. Y, en ese punto, destacó que la manera de dar respuestas a las necesidades de esta parte de la población no es solo brindando asistencia sino también facilitando la creación de empleo y desarrollo de la comunidad.
“Trasa es una empresa de triple impacto, y como toda empresa de triple impacto debe tener un propósito. El nuestro es llevar inclusión financiera para todas las personas. Eso lo logramos acercando infraestructura de servicios financieros a este tipo de comunidades”, señaló Ricky Minicucci, fundador de la compañía.
La nueva UMIF ya había comenzado a funcionar en el mes de mayo, mientras que ahora, en septiembre, se llevó a cabo la inauguración oficial, con presencia de representantes del más alto rango del Gobierno de la Ciudad y diferentes organizaciones que intervinieron en la emisión de la obligación negociable, como SMS – San Martín Suárez & Asociados (auditor), Galicia (organizador y garante), y el estudio Beccar Varela (estructuración legal).
Luego de esta inauguración, Trasa suma un total de 20 centros de servicios y 24 cajeros automáticos Pago24 instalados dentro de barrios populares de Argentina.
Primera ON con etiquetado social
La inauguración, por su parte, permite cerrar un proceso de financiamiento inédito, ya que tanto este cajero como otros 11 que inauguró previamente la compañía, fueron financiados mediante la primera Obligación Negociable con etiquetado social.
Se trató de la ON Pyme Social, validada por SMS Latinoamérica, a través de la cual se emitieron $ 30.000.000, que fueron utilizados para refinanciar la instalación de 12 cajeros automáticos y tres Unidades Modulares de Inclusión Financiera Pago24, ubicados en barrios populares de Buenos Aires, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Chaco, Entre Ríos, Misiones y Salta, que hasta el momento impactan positivamente a más de de 75.000 familias en situación de vulnerabilidad, de acuerdo con el Registro Nacional de Barrios Populares (ReNaBaP).
Esta Obligación Negociable le permitió a Trasa seguir cumpliendo su propósito de llevar inclusión financiera a más personas, contribuyendo con el desarrollo social y el crecimiento económico de barrios populares, a través de la mejora en el acceso a la infraestructura financiera de sus habitantes.
Trayectoria en inclusión
Trasa, cuya misión es brindar productos y servicios financieros que contribuyan a un mercado más inclusivo y amigable con el medio ambiente, es una compañía particularmente conocida por haber nacido al calor de la crisis del 2001, de la mano de su fundador, Ricky Minicucci.
Fue la primera empresa en instalar un cajero en el Barrio Padre Carlos Mugica (ex villa 31) de la Capital, durante el año 2017 cuando la integración y urbanización eran incipientes. Cada vez que instalan una UMIF, realizan, a su vez, mediante acuerdos con gobiernos y organizaciones sociales, capacitaciones de educación financiera.
Los cajeros permiten que crezcan los comercios de cercanía y, en particular, tienen un uso que es comprobadamente superior al de los situados en las zonas más afines a los servicios financieros tradicionales. Este acceso, además de efectivo, busca ser pleno, justo y responsable
En cuanto al impacto de estos productos, vale recalcar que el 30% de los cajeros de Trasa está instalado en barrios populares, por lo que alcanzan aproximadamente a unas 75.000 familias, lo que equivale estimativamente a 350.000 personas en situación de fragilidad socioeconómica.